Tras estos hechos, una ley, aprobada ya el año pasado, explica que quienes deseen inmigrar deban pedir un visado en el consulado chileno antes de llegar a Chile, cosa que en la práctica no ha funcionado bien.
Muchas de las personas extranjeras que han intentado ingresar al país de forma legal, han caido en la deseperación de tomar otras medidas debido a los retrasos en la tramitación de solicitudes y muchas se deniegan. A esto se sumó el cierre de los pasos habilitados formalmente, debido en la pandemia.
Así lo ha demostrado el crecimiento de las denuncias por ingreso clandestino que tiene la Policía de investigaciones, que tan solo en el año 2022 han alcanzado cerca de 50.000″.
Otro de los puntos de la nueva ley tiene que ver con la expulsión. Donde la problemática recae en que no tienen bien trazado el mecanismo de reconducción. dice el académico chileno. Entregan a una persona supuestamente a la Policía boliviana, pero la Policía boliviana tiene que tener la disposición de recibirla, y eso actualmente no ocurre.
Los expertos que han sido entrevistados, coinciden en criticar la inacción del Estado en el asunto, donde aseguran que el más afectado será el futuro presidente que asumirá su cargo el 11 de de marzo, Gabriel Boric, puesto que el caso no tienen solución ni respuesta. Por tanto, aseguran que deberá enfrentar una situación de restaurar el orden público, el estado de Derecho y el pleno funcionamiento institucional en cuanto recién asuma.